viernes, 21 de septiembre de 2018

AL COLE

Carlota hija llegó el tan deseado y a la vez temido día. Empezaste el colegio y con eso nuestra separación por largos espacios de tiempo un día tras otros. Tu no eres una niña enmadrada pero entiendo que yo soy tu apoyo y tu guia, tu refugio donde volver cuándo no sabes resolver un problema, y en el colegio no estoy. Esa es la parte que no estás llevando muy bien en el colegio pero se que es cuestión de tiempo que empieces a disfrutar y mucho. 
El primer día ibas muy contenta, incluso el día anterior cuando fuimos a conocer al profe Diego (es un sol) y la clase llorabas porque no querías irte del cole, pero al ver llorar a los niños te contagiaste sin entender muy bien  y ya poco a poco a peor. Ahora ya llevas dos semanas y cada vez mejor, no se puede decir que vayas contenta pero ya no lloras aunque sigues diciendome que no te gusta el colegio porque me echas de menos. Ahí se me parte el corazón. Luego te dejo en clase, miro por la ventana y veo que estás ya sentada, mochila colgada y tan pancha...entonces vuelvo a casa tranquila.
Has caido en clase con tu "más mejor amiga" Julia y estáis muy contentas, es un apoyo mutuo y también tienes la suerte de que la seño Mati te de inglés. Mati y su sonrisa. 
Cómo era de esperar no influye para nada que los niños hayan ido a la guardería o no, lloran todos por igual, creo que va todo en vuestra persona. Tú y yo somos muy complices y tenemos mucho apego pero no me pesa, sé que poco a poco irás aflojando el hilo invisible que nos une para agarrar otros y hacer fuertes vínculos con amigos que en algún caso te acompañarán por mucho tiempo. Tienes las herramientas Carlota, para eso te estamos educando para que tengas criterio, miedos los justos y cuando los tengas sepas afrontarlos, tienes un carácter fuerte y mucha personalidad y simpatía para regalar. Buena carta de presentación hija jajaja. Confío en ti, tienes que empezar a volar y ser y hacer por ti misma, dentro de tus limites claro.
Hoy te he pintado un corazón con bolígrafo en la mano y llenado de besos para cuándo te pongas triste cojas los besos que quieras ¡¡ay que peque eres!!